Mendoza: Desalojo de vendedores callejeros afecta a migrantes
(Desdelsur, Mendoza) Más de 100 cien puestos callejeros fueron retirados del Hospital Central de Mendoza, afectando a igual número de familias de migrantes bolivianos, paraguayos, peruanos y senegaleses.
La medida, que originalmente fue explicada por las autoridades municipales como un recursos para “ordenar la ciudad” derivó en una serie de manifestaciones xenofóbicas.
La Municipalidad de Capital culpó a los vendedores extranjeros por la inseguridad en la zona del Central. Raúl Levrino, subsecretario de Seguridad de la Municipalidad de Capital, aseguró que los puestos que se encuentran en el predio aledaño al Hospital Central son de "colombianos, peruanos senegaleses y bolivianos" y que "generan problemas de seguridad pública y de higiene pública afectando con robos y arrebatos".
Un cuerpo de inspectores municipales y policías de Mendoza realizó el operativo para desalojar a los vendedores ambulantes que suelen moverse en la periferia de ese nosocomio. Encintaron varias zonas para que no se acomodaran los ambulantes y ahora custodian férreamente todo el perímetro del hospital más importante de la provincia.
El Municipio de la Capital se hizo cargo del operativo y anunció que no cederá a las demandas de los ambulantes, como ocurrió tiempo atrás cuando se procedió al desalojo de los persas de la calle General Paz.
Levrino atribuyó la inseguridad en la zona a los vendedores extranjeros y se enfureció cuando se le indicó que sus expresiones tenían un fuerte componente discriminatorio.
En medio de la tensión, una columna de opinión en el periódico MDZ on line, firmada por el periodista Marcelo Padilla, puso más gasolina al asunto.
“Negros de mierda ¡go home!”, es el título de la columna en la que, entre otras, se dice “Feos, sucios y malos. Son una extranjería que existe para dar testimonio de la lacra étnico-social y cultural. Una especie de resaca del mundo que se las rebusca en Mendoza parando en hoteluchos de mala muerte, hacinados, durmiendo ocho en una cama, cagando y meando donde pueden, bañándose cuando los dejan. Son negros color azabache, hablan en un idioma extraño, tienen creencias y no religiones, se visten de colores y les cuelgan baratijas de una bisutería símil plata u oro, de décima. Otros ostentan facciones aindiadas, da lo mismo: peruanos, ecuatorianos o bolivianos.”
La reacción no se dejó esperar, y el periódico MDZ en line, donde apareció la columna se vio obligado a publicar una aclaración sobre la nota y expresar sus disculpas a las colectividades.
“El sentido de la nota de Marcelo Padilla, en discusión, intentó reconvertir en reflexión un discurso xenófobo en el pensar de muchos. Aquí, el autor da su motivación y postura sobre un conflicto en el que los vendedores ambulantes fueron estigmatizados por los dichos del funcionario Levrino y por el intendente de la Ciudad. Y pide disculpas por las interpretaciones que se hicieran de su texto original.
En su aclaración, el periodista Marcelo Padilla, sostiene que “el efecto irónico que intenté en la nota Negros de mierda ¡Go Home! no fue conseguido en toda su dimensión”.
Pide las “más sinceras disculpas a la comunidad boliviana, peruana y ecuatoriana por la ineficacia de la nota vertida. Nunca, jamás, fue y será mi intención ofender a hermanos latinoamericanos ni de otras nacionalidades. El sentido de la nota en discusión intentó reconvertir en un discurso xenófobo el pensar de muchos mendocinos que, tras la avanzada de la Municipalidad de Capital sobre los vendedores ambulantes, en las puertas del Hospital Central fueron estigmatizados por los dichos del funcionario Levrino y por el intendente de la Ciudad, hechos ya advertidos por el Inadi”.
Mientras tanto, continúan los reclamos de los vendedores ambulantes que han vuelto a cortar la calle frente al Hospital Central. Desde hace dos días, están apostados en la explanada de la Municipalidad de Capital, pero marcharon hasta el Hospital Central para continuar con su reclamo y reposición de puestos de venta callejera en las inmediaciones.
FONTE
DESDELSUR
RADIOINFINITAWEB
(Desdelsur, Mendoza) Más de 100 cien puestos callejeros fueron retirados del Hospital Central de Mendoza, afectando a igual número de familias de migrantes bolivianos, paraguayos, peruanos y senegaleses.
La Municipalidad de Capital culpó a los vendedores extranjeros por la inseguridad en la zona del Central. Raúl Levrino, subsecretario de Seguridad de la Municipalidad de Capital, aseguró que los puestos que se encuentran en el predio aledaño al Hospital Central son de "colombianos, peruanos senegaleses y bolivianos" y que "generan problemas de seguridad pública y de higiene pública afectando con robos y arrebatos".
Un cuerpo de inspectores municipales y policías de Mendoza realizó el operativo para desalojar a los vendedores ambulantes que suelen moverse en la periferia de ese nosocomio. Encintaron varias zonas para que no se acomodaran los ambulantes y ahora custodian férreamente todo el perímetro del hospital más importante de la provincia.
El Municipio de la Capital se hizo cargo del operativo y anunció que no cederá a las demandas de los ambulantes, como ocurrió tiempo atrás cuando se procedió al desalojo de los persas de la calle General Paz.
Levrino atribuyó la inseguridad en la zona a los vendedores extranjeros y se enfureció cuando se le indicó que sus expresiones tenían un fuerte componente discriminatorio.
En medio de la tensión, una columna de opinión en el periódico MDZ on line, firmada por el periodista Marcelo Padilla, puso más gasolina al asunto.
“Negros de mierda ¡go home!”, es el título de la columna en la que, entre otras, se dice “Feos, sucios y malos. Son una extranjería que existe para dar testimonio de la lacra étnico-social y cultural. Una especie de resaca del mundo que se las rebusca en Mendoza parando en hoteluchos de mala muerte, hacinados, durmiendo ocho en una cama, cagando y meando donde pueden, bañándose cuando los dejan. Son negros color azabache, hablan en un idioma extraño, tienen creencias y no religiones, se visten de colores y les cuelgan baratijas de una bisutería símil plata u oro, de décima. Otros ostentan facciones aindiadas, da lo mismo: peruanos, ecuatorianos o bolivianos.”
La reacción no se dejó esperar, y el periódico MDZ en line, donde apareció la columna se vio obligado a publicar una aclaración sobre la nota y expresar sus disculpas a las colectividades.
“El sentido de la nota de Marcelo Padilla, en discusión, intentó reconvertir en reflexión un discurso xenófobo en el pensar de muchos. Aquí, el autor da su motivación y postura sobre un conflicto en el que los vendedores ambulantes fueron estigmatizados por los dichos del funcionario Levrino y por el intendente de la Ciudad. Y pide disculpas por las interpretaciones que se hicieran de su texto original.
En su aclaración, el periodista Marcelo Padilla, sostiene que “el efecto irónico que intenté en la nota Negros de mierda ¡Go Home! no fue conseguido en toda su dimensión”.
Pide las “más sinceras disculpas a la comunidad boliviana, peruana y ecuatoriana por la ineficacia de la nota vertida. Nunca, jamás, fue y será mi intención ofender a hermanos latinoamericanos ni de otras nacionalidades. El sentido de la nota en discusión intentó reconvertir en un discurso xenófobo el pensar de muchos mendocinos que, tras la avanzada de la Municipalidad de Capital sobre los vendedores ambulantes, en las puertas del Hospital Central fueron estigmatizados por los dichos del funcionario Levrino y por el intendente de la Ciudad, hechos ya advertidos por el Inadi”.
Mientras tanto, continúan los reclamos de los vendedores ambulantes que han vuelto a cortar la calle frente al Hospital Central. Desde hace dos días, están apostados en la explanada de la Municipalidad de Capital, pero marcharon hasta el Hospital Central para continuar con su reclamo y reposición de puestos de venta callejera en las inmediaciones.
FONTE
DESDELSUR
RADIOINFINITAWEB
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