Se enfrenta hoy a Colombia (15:00) en Santa Fe. Una derrota será lapidaria; aún hay esperanzas
Gery Zurita Mustafá. Santa Fe El tercer desafío, aunque a diferencia del último partido que acabó con derrota (2-0) frente a Costa Rica, la selección no llega como favorita. En frente estará la Colombia que casi humilla a la local Argentina (0-0) y que va por una victoria para asegurarse el primer lugar del grupo A. En Bolivia, el técnico Gustavo Quinteros anticipa varios cambios, tres de ellos obligados tras las expulsiones de Ronald Rivero y Wálter Flores y de la suspensión por tarjetas amarillas de Luis Gutiérrez. Se jugará desde las 15:00. Luego del trago amargo que dejó el encuentro en Jujuy, el plantel se instaló desde el viernes en Paraná, una ciudad a 40 minutos del centro de Santa Fe, donde hoy será el encuentro. Ayer, por la mañana, realizó un trabajo táctico a puertas cerradas en el estadio Bartolomé Grella; ahí mismo, el seleccionador confirmó el onceno titular, que incluye a Cristhian Vargas por el carril derecho, a Santos Amador como zaguero central y confirma a Juan Carlos Arce como acompañante de Marcelo Martins en ofensiva. Además está claro que Ronald García remplazará a Flores y como su acompañante, en la contención, fue confirmado Jaime Robles. El jugador de Aurora era duda hasta ayer por un problema en la rodilla, pero Quinteros lo confirmó en el trabajo que se cumplió por la mañana. “Voy a priorizar a los que vienen jugando”, dijo el técnico en conferencia de prensa ante los medios nacionales luego del trabajo. En principio también se manejó la posibilidad de que Martins hubiera dejado su lugar a Ricardo Pedriel, pero ayer el DT lo descartó. El panorama que tiene la selección en el grupo A es complicado, ya que para aspirar a avanzar a cuartos de final debe superar hoy a Colombia y esperar otros resultados, como que Argentina no gane a Costa Rica mañana o que en los otros dos grupos los terceros no sumen cuatro unidades. Si Bolivia cae hoy, será la primera selección en ser eliminada del campeonato. Además, habrá repetido la misma actuación de las últimas dos versiones de la Copa América (Perú 2004 y Argentina 2007), que tras empatarle al anfitrión en el debut no puede ganar en sus siguientes duelos. Bolivia no vence en este torneo desde 1997 cuando sacó a México (3-0) en las semifinales disputadas en La Paz; después de ese encuentro han sido solo frustraciones. |
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